La Web semántica es un movimiento liderado por el W3C que pretende la creación de tecnologías, estándares y formatos que permitan publicar en la web datos legibles por aplicaciones informáticas, para así convertir la web actual, dominada por documentos desestructurados o semi-estructurados, en una web donde las páginas incluyan contenido semántico legible por máquinas.
Qué es la Web semántica
La Web semántica es una iniciativa del W3C (World Wide Web Consortium) que intenta crear tecnologías que permitan publicar contenidos en la web que sean legibles por máquinas, añadiendo metadatos semánticos a la web.
Esos metadatos (datos sobre los datos) describen el contenido, su significado y su relación, y se deben proporcionar de manera formal, para que puedan ser procesados automáticamente por sistemas informáticos sin operadores humanos.
El creador de la web, Tim Berners-Lee, autor del lenguaje HTML (HyperText Markup Language), el protocolo HTTP (HyperText Transfer Protocol) y las URL (Uniform Resource Locator), intentó desde el principio incluir información semántica en la web, pero por diferentes motivos no fue posible, lo que intenta remediar con la Web semántica.
Así pues, la web semántica es una ampliación de la web, de tal manera que la información contenida en la web sea entendible por las propias máquinas.
Respecto a los componentes de la Web semántica, los principales componentes de la Web semántica son los estándares XML, XML Schema, RDF, RDF Schema, OWL y SPARQL.
En cuanto a la relación entre la Web semántica y la Web 2.0, la Web semántica responde a un estado más evolucionado de la web, a la Web 3.0. La principal diferencia entre ambas es que la Web semántica está orientada hacia los procesadores de información que mediante diversos lenguajes de metadatos procesan la información publicada en la web, mientras que la Web 2.0 tiene como principal protagonista al usuario humano que genera y comparte contenidos.
Por lo que se refiere a la relación entre la Web semántica y la Web 3.0, la Web semántica es sólo un aspecto de la Web 3.0, que va más allá y pretende, además de transformar la red en una base de datos, impulsar tecnologías como la inteligencia artificial, la Web Geoespacial, la Web 3D o la realidad aumentada (augmented reality).
Respecto a las dificultades, existen varios obstáculos para la implementación de la Web semántica:
- Tecnológica: se deben desarrollar lenguajes de metadatos, agentes automáticos que procesen los metadatos y servicios web que provean de información a los agentes.
- Falta de interés de los propietarios de las páginas web: son los responsables de transformar las páginas web en bases de datos mediante la implementación de metadatos en sus contenidos para que el sistema funcione correctamente.
- Dudas sobre el modelo de negocio: los actuales modelos de negocio en Internet, basados en gran medida en la publicidad, generan dudas en cuanto a su capacidad para adaptarse a una Web semántica masiva.
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